LA EVOLUCIÓN HACIA EL TOTALITARISMO
Tabla de contenidos
- 1 ¿PUEDE EUROPA PERMITIRSE EL LUJO DE HACER LA VISTA GORDA ANTE LA EVIDENCIA DEL PAPEL DE EE. UU. EN LAS EXPLOSIONES DE OLEODUCTOS?
- 2 LA EVOLUCIÓN HACIA EL TOTALITARISMO
- 3 ‘AHORA, TODOS USTEDES SON AZOV’: una delegación ucraniana ‘abiertamente neonazi’ se reúne en el Congreso y recorre EE. UU.
- 4 ZELENSKY BORRA SILENCIOSAMENTE LA FOTO DEL PARCHE PRO-HITLER DE SU GUARDAESPALDAS
- 5 “ESTOS SON ANIMALES, NO PERSONAS”: Zelensky libera a violadores de niños condenados, torturadores para reforzar militares agotados
- 5.1 A medida que las unidades regulares desertan después de Maidan, los batallones llenan el vacío.
- 5.2 Tornado se forma en medio de fracaso militar
- 5.3 “Esta unidad está fuera de control”: Funcionarios ucranianos e informes de derechos humanos patrocinados por el Departamento de Estado detallan el increíble sadismo de Tornado
- 5.4 Una película de terror de la vida real se desarrolla en el juicio del batallón Tornado
- 6 TWITTER PERMITE EL ACOSO NAZI DESDE ALEMANIA
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¿PUEDE EUROPA PERMITIRSE EL LUJO DE HACER LA VISTA GORDA ANTE LA EVIDENCIA DEL PAPEL DE EE. UU. EN LAS EXPLOSIONES DE OLEODUCTOS?
Por Jonathan Cook
MintPress News, 6 OCT 2022
El sabotaje de los dos oleoductos Nord Stream dejará a los europeos mucho más pobres y con más frío este invierno, y fue un acto de vandalismo internacional en una escala casi inimaginable. Los ataques cortaron el suministro de gas ruso a Europa y provocaron la liberación de enormes cantidades de gas metano, el principal culpable del calentamiento global.
Es por eso que nadie va a asumir la responsabilidad del crimen, y lo más probable es que nadie sea declarado definitivamente culpable.
No obstante, el nivel de dificultad y sofisticación en la activación de explosiones en tres ubicaciones separadas en los oleoductos Nord Stream 1 y 2 sugiere abrumadoramente que un actor o actores estatales estaban detrás de esto.
La cobertura occidental de los ataques ha sido decididamente silenciada, dado que este asalto hostil a la infraestructura energética del mundo no tiene precedentes, eclipsando incluso los ataques del 11 de septiembre.
La razón por la que parece haber tan poco entusiasmo por explorar este evento catastrófico en detalle, más allá de señalar con el dedo en dirección a Rusia, no es difícil de deducir.
Es difícil pensar en una sola razón por la que Moscú desee destruir sus propios conductos de energía, valorados en 20.000 millones de dólares, o dejar entrar agua de mar, posiblemente corroyéndolos de forma irreversible.
Los ataques privan a Rusia de sus principales líneas de suministro de gas a Europa, y con ello, ingresos futuros vitales, al tiempo que dejan el campo abierto a los competidores.
Moscú pierde su única influencia significativa sobre Alemania, su principal comprador en Europa y el corazón del proyecto europeo, cuando más la necesita, ya que se enfrenta a los esfuerzos concertados de Estados Unidos y Europa para expulsar a los soldados rusos de Ucrania.
Incluso cualquier posible ventaja temporal que Moscú podría haber obtenido al demostrar su crueldad y poderío a Europa podría haberse logrado con la misma eficacia simplemente cerrando el grifo para detener los suministros.
TABÚ DE LOS MEDIOS
Esta semana, el distinguido economista Jeffrey Sachs fue invitado en Bloomberg TV para hablar sobre los ataques a los oleoductos. Rompió un tabú entre las élites occidentales al citar pruebas que sugerían que Estados Unidos, y no Rusia, era el principal sospechoso.
Los medios occidentales como Associated Press han tratado de excluir esa línea de pensamiento calificándola de «teoría de conspiración sin fundamento» y «desinformación» rusa. Pero, como señaló Sachs, hay buenas razones para sospechar que Estados Unidos está por encima de Rusia.
Está, por ejemplo, la amenaza a Rusia hecha por el presidente estadounidense Joe Biden a principios de febrero de que “ya no habrá un Nord Stream 2” si se invadiera Ucrania. Cuestionado por un reportero sobre cómo sería eso posible, Biden afirmó : “Te prometo que seremos capaces de hacerlo”.
Biden no estaba hablando fuera de lugar o de improviso. Al mismo tiempo, Victoria Nuland, una diplomática de alto rango en la administración de Biden, emitió a Rusia la misma advertencia y les dijo a los periodistas: “Si Rusia invade Ucrania, de una forma u otra, Nord Stream 2 no avanzará”.
Ese es la misma Nuland que estuvo íntimamente involucrado en 2014 en las maniobras detrás de escena de los EE. UU. para ayudar a derrocar a un gobierno ucraniano electo que condujo a la instalación de uno hostil a Moscú. Fue ese golpe el que desencadenó una combinación combustible de resultados: el creciente coqueteo de Kiev con la OTAN, así como una guerra civil en el este entre los ultranacionalistas ucranianos y las comunidades étnicas rusas, que proporcionaron la razón principal para la posterior invasión del presidente Vladimir Putin.
Y para aquellos que aún no saben qué motivo podría tener Estados Unidos para perpetrar semejante atentado, el jefe de Nuland amablemente ofreció una respuesta el viernes pasado. El secretario de Estado, Anthony Blinken, describió la destrucción de los oleoductos de Nord Stream y la consiguiente catástrofe ambiental como una «tremenda oportunidad estratégica para los años venideros«.
Blinken estableció demasiado claramente el «cui bono» – «¿quién se beneficia?» – argumento, lo que sugiere que los comentarios anteriores de Biden y Nuland no fueron solo una postura vacía de la Casa Blanca antes de la invasión.
Blinken celebró el hecho de que Europa se vería privada del gas ruso en el futuro previsible y, con ello, la influencia de Putin sobre Alemania y otros estados europeos. Antes de las explosiones, el peligro para Washington era que Moscú pudiera avanzar en negociaciones favorables sobre Ucrania en lugar de perpetuar una guerra que el secretario de defensa de Biden, Lloyd Austin, ya ha declarado que está diseñada para «debilitar» a Rusia al menos tanto como para liberar a Ucrania. O, como lo expresó Blinken, los ataques fueron “una tremenda oportunidad de una vez por todas para eliminar la dependencia de la energía rusa y, por lo tanto, quitarle a Vladimir Putin el uso de la energía como un medio para avanzar en sus diseños imperiales”.
Aunque Blinken no lo mencionó, también fue una “tremenda oportunidad” para hacer que Europa dependiera mucho más de los EE. UU. para sus suministros de gas, enviado por mar a Europa a un costo mucho mayor que a través de los oleoductos de Rusia. Las empresas energéticas estadounidenses bien pueden ser las mayores beneficiarias de las explosiones.
INMISCUIRSE EN UCRANIA
La hostilidad de Estados Unidos hacia los lazos económicos de Rusia con Europa no es nueva. Mucho antes de la invasión de Rusia, Washington había buscado abiertamente formas de bloquear los oleoductos Nord Stream.
Una de las predecesoras recientes de Blinken, Condoleezza Rice, expresó el consenso de Washington en 2014, al mismo tiempo que se grababa a Nuland entrometiéndose en secreto en Ucrania, discutiendo quién debería ser instalado como presidente en lugar del gobierno electo de Ucrania que estaba a punto de ser derrocado en un golpe de estado.
En declaraciones a la televisión alemana, Rice dijo que la economía rusa era vulnerable a las sanciones porque el 80% de sus exportaciones estaban relacionadas con la energía. Demostrando cuán equivocadas suelen ser las predicciones de la política exterior estadounidense, afirmó con confianza: “La gente dice que los europeos se quedarán sin energía. Bueno, los rusos se quedarán sin efectivo antes de que los europeos se queden sin energía”. Romper la dependencia de Europa de la energía rusa fue, en palabras de Rice, «uno de los pocos instrumentos que tenemos… A largo plazo, simplemente quieres cambiar la estructura de la dependencia energética«.
Agregó: “Ustedes [Alemania] quieren depender más de la plataforma energética de América del Norte, la enorme abundancia de petróleo y gas que estamos encontrando en América del Norte. Quieres tener oleoductos que no pasen por Ucrania y Rusia”.
Ahora, el sabotaje de Nord Stream 1 y 2 ha logrado un importante objetivo de la política exterior de EE. UU. de la noche a la mañana.
También se ha adelantado al aumento de la presión en Alemania, a través de protestas masivas y una creciente oposición empresarial, que podría haber hecho que Berlín revirtiera el curso de las sanciones europeas a Rusia y reactivara los suministros de gas, un cambio que habría socavado el objetivo de Washington de “debilitar” a Putin. Ahora, las protestas son redundantes. Los políticos alemanes no pueden ceder a las demandas populares cuando no hay un gasoducto a través del cual puedan abastecer a su población con gas ruso.
‘GRACIAS, ESTADOS UNIDOS’
Uno no puede sorprenderse de que los líderes europeos culpen públicamente a Rusia por los ataques al oleoducto. Después de todo, Europa cae bajo el paraguas de seguridad de los EE. UU. y Rusia ha sido designada por Washington como el Enemigo Oficial No. 1.
Pero es casi seguro que las principales capitales europeas están sacando conclusiones diferentes en privado. Al igual que Sachs, sus funcionarios están examinando la evidencia circunstancial, considerando las declaraciones de autoincriminación de Biden y otros funcionarios, y sopesando los argumentos «cui bono«.
Y al igual que Sachs, lo más probable es que estén infiriendo que el principal sospechoso en este caso es EE. UU. o, al menos, que Washington autorizó a un aliado a actuar en su nombre. Así como ningún líder europeo se atrevería a acusar públicamente a los EE. UU. de llevar a cabo los ataques, ninguno se atrevería a organizar tal ataque sin obtener primero el visto bueno de Washington.
Evidentemente, esa fue la opinión de Radek Sikorski, el exministro de Relaciones Exteriores y Defensa de Polonia, quien tuiteó un “Gracias, EE. UU.” con una imagen de los mares burbujeantes donde se rompió un oleoducto.
Cabe señalar que Sikorski está tan bien conectado en Washington como en Polonia, un estado europeo amargamente hostil a Moscú y a sus oleoductos. Su esposa, Anne Applebaum, es redactora de la revista The Atlantic y una figura influyente en los círculos políticos de EE. UU. que durante mucho tiempo abogó por la expansión de la OTAN y la UE en Europa del Este y Ucrania.
Sikorski rápidamente eliminó el tuit después de que se volvió viral.
Pero si Washington es el principal sospechoso de la voladura de los oleoductos, ¿cómo debería interpretar Europa sus relaciones con EE.UU. a la luz de esa deducción? ¿Y qué indica tal sabotaje a los líderes de Europa sobre cómo Washington podría percibir lo que está en juego en Europa? Las respuestas no son bonitas.
DEMANDA DE LEALTAD
Si EE. UU. estuvo detrás de los ataques, sugiere no solo que Washington está llevando la guerra de Ucrania a un territorio nuevo y más peligroso, listo para arriesgarse a llevar a Moscú a una ronda de ojo por ojo que podría convertirse rápidamente en una confrontación nuclear. También sugiere que los lazos entre Estados Unidos y Europa también han entrado en una nueva etapa decisiva.
O dicho de otra manera, Washington habría hecho más que salir de las sombras, convirtiendo su guerra de poder en Ucrania en una guerra más directa y acalorada con Rusia. Indicaría que EE. UU. está dispuesto a convertir toda Europa en un campo de batalla e intimidar, traicionar y potencialmente sacrificar a la población del continente con la misma crueldad con la que tradicionalmente ha tratado a los aliados débiles en el Sur Global.
En ese sentido, lo más probable es que los líderes europeos interpreten las rupturas del oleoducto como una señal: que no deberían atreverse a considerar formular su propia política exterior independiente, o contemplar desafiar a Washington. Los ataques indican que EE.UU. exige lealtad absoluta, que Europa debe postrarse ante Washington y aceptar los dictados que impone.
Eso equivaldría a una reversión dramática del Plan Marshall, el ambicioso financiamiento de Washington para la reconstrucción de Europa occidental después de la Segunda Guerra Mundial, principalmente como una forma de restaurar el mercado para las industrias estadounidenses en rápida expansión.
Por el contrario, este acto de sabotaje estrangula económicamente a Europa, llevándola a la recesión, profundizando su deuda y convirtiéndola en esclava de los suministros energéticos estadounidenses. Efectivamente, la administración Biden habría pasado de ofrecer zanahorias jugosas a las élites europeas a ahora blandirles un garrote muy grande.
AGRESIÓN DESPIADADA
Por esas razones, los líderes europeos pueden no estar dispuestos a contemplar que su aliado al otro lado del Atlántico pueda comportarse de manera tan cruel contra ellos. Las implicaciones son más que inquietantes.
La conclusión que los líderes europeos tendrían que sacar es que la única justificación para una agresión tan despiadada es que Estados Unidos está maniobrando para evitar el colapso de su dominio global de la posguerra, el fin de su imperio militar y económico.
La destrucción de los oleoductos tendría que entenderse como un acto de desesperación: una prevención de última hora por parte de Washington de la pérdida de su hegemonía mientras Rusia, China y otros encuentran una causa común para desafiar al gigante estadounidense, y un feroz golpe contra Europa. para recalcar el mensaje de que no debe desviarse del redil.
Al mismo tiempo, arrojaría una luz diferente y más clara sobre los acontecimientos que se han estado desarrollando en Ucrania y sus alrededores en los últimos años:
• La implacable expansión de la OTAN en Europa del Este a pesar de las advertencias de los expertos de que eventualmente provocaría a Rusia.
• La intromisión de Biden y Nuland para ayudar a derrocar a un gobierno ucraniano electo simpatizante de Moscú.
• El cultivo de un ultranacionalismo ucraniano militarizado enfrentado a Rusia que condujo a una guerra civil sangrienta contra las propias comunidades étnicas rusas de Ucrania.
• Y el enfoque exclusivo de la OTAN en intensificar la guerra mediante el suministro de armas a Ucrania en lugar de buscar e incentivar la diplomacia.
Ninguno de estos desarrollos puede eliminarse de una evaluación realista de por qué Rusia respondió invadiendo Ucrania.
Se ha convencido a los europeos de que deben brindar un apoyo moral y militar inquebrantable a Ucrania porque es la última muralla que defiende su patria del despiadado imperialismo ruso.
Pero el ataque a los oleoductos apunta a una historia más compleja, una en la que los ciudadanos europeos deben dejar de fijar su mirada exclusivamente en Rusia y darse la vuelta para comprender lo que ha estado sucediendo a sus espaldas.
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Foto destacada | Oficiales de policía acompañan una manifestación contra las sanciones a Rusia mientras se sostiene una pancarta con la inscripción «Abrir Nordstream 2 inmediatamente», 05 de septiembre de 2022. Sebastian Willnow | DPA a través de AP
Jonathan Cook es colaborador de MintPress. Cook ganó el Premio Especial de Periodismo Martha Gellhorn. Sus últimos libros son Israel y el choque de civilizaciones: Irak, Irán y el plan para rehacer el Medio Oriente (Pluto Press) y Palestina en desaparición: los experimentos de Israel en la desesperación humana (Zed Books). Su sitio web es www.jonathan-cook.net .
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LA EVOLUCIÓN HACIA EL TOTALITARISMO
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‘AHORA, TODOS USTEDES SON AZOV’: una delegación ucraniana ‘abiertamente neonazi’ se reúne en el Congreso y recorre EE. UU.
Después de reunirse con al menos 50 miembros del Congreso, los soldados del Regimiento neonazi Azov recorrieron los EE. UU. para subastar parches inspirados en la esvástica y cabildear para que se ponga fin a las restricciones sobre las armas y el entrenamiento de los EE. UU.
Este septiembre, una delegación del movimiento Azov liderado por neonazis ucranianos llegó a los Estados Unidos, en un momento en que la creación de mitos sobre la “despolitización” de la red de extrema derecha había alcanzado un punto álgido. En ese momento, el New York Times había dejado de referirse a Azov como «abiertamente neonazi» y se refería a la organización ultranacionalista como «célebre«.
Desde que se conoció la noticia de la gira estadounidense de Azov, ha salido a la luz más información sobre el alcance de la organización ultranacionalista en el país, incluidos los esfuerzos de Azov para revertir la prohibición del Congreso de suministrarle armas y entrenamiento.
La delegación de Azov incluía a tres veteranos del regimiento que anteriormente se escondían en la planta siderúrgica de Azovstal en Mariupol. Fueron dirigidos por Giorgi Kuparashvili, el único luchador que no fue hecho prisionero por los rusos.
Según Kuparashvili, cofundador e instructor del Regimiento Azov, su delegación se reunió con más de cincuenta miembros del Congreso, muchos más de los que nadie se ha dado cuenta. Entre los que se presentaron para saludar a Azov en el Capitolio se encontraba el representante Adam Schiff, el demócrata de California que pasó la era Trump encabezando el teatro del Russiagate y clamó por envíos de armas ofensivas estadounidenses a Ucrania.
El trío estuvo acompañado por dos cónyuges y una madre de prisioneros de guerra capturados en Azovstal. Esto incluyó a Kateryna Prokopenko, la esposa del comandante de extrema derecha del Regimiento Azov, Denys Prokopenko, quien fue liberado en un intercambio de prisioneros y declarado Héroe de Ucrania durante su visita a los Estados Unidos. La otra esposa de Azov de la delegación era Yulia Fedosyuk, líder de “La plata de la rosa”, un grupo antifeminista y antigay vinculado al movimiento Azov, según el periodista Oleksiy Kuzmenko.
“Estas son en realidad dos letras, dos letras latinas, N e I. La N significa Nacional; Yo, es Idea. Idea Nacional. Idea Nacional. Para regimiento, es nuestro lema. Idea Nacional. Todos los países, no importa, son EE. UU., Ucrania, lo que sea. Cuando el país estaba en problemas, el centro de gravedad siempre se convirtió en los nacionalistas. La Idea Nacional. Toda la nación se reúne en torno a los nacionalistas y en torno a la Idea Nacional. Para nosotros, National Idea es Ucrania. Si no les gusta lo que es Ucrania, y lo que es la Idea Nacional, al diablo con ellos…” Kuparahsvili, refiriéndose al concepto totalitario nacionalista ucraniano de “natiocracia”, casi admitió la afinidad de Azov por los nacionalistas blancos en Occidente.
Según Kuparashvili, antes, solo los miembros de Azov podían usar sus parches de wolfsangel , pero otorgó permiso a la audiencia para hacer sus ofertas, porque “ahora, todos ustedes son Azov”. Hubo otro descargo de responsabilidad que Kuparashvili compartió solo después de que surgieron los ganadores. “Es una responsabilidad”, dijo.
“Solo lo estamos entregando”, dijo Kuparashvili a la audiencia sobre los parches del Regimiento Azov. “Les estamos dando a esos nuestra responsabilidad. Tenemos a los soldados donde pasan por el entrenamiento básico, pasan por todos los entrenamientos y dificultades. Si no lo merecen, no puedes graduarte… Pero si lo mereces, esto conlleva una responsabilidad… Tu idea nacional es Ucrania. Tienes que luchar por ello. No solo ponerlo en una habitación o en un estante en algún lugar, sino que tienes que luchar por él. Lucha por tu idea nacional…”. Cada uno de los ganadores saludó a Kuparashvili al estilo de Azov.
Dos días después, el Instituto Ucraniano de Arte Moderno en Chicago organizó otra subasta benéfica de Azov, copatrocinada por la División de Illinois del Comité del Congreso Ucraniano de América, dirigida por Banderite. Su miembro más influyente, Pavlo Bandriwsky, líder de la OUN-B en Chicago conocido como “el Estratega”, se tomó fotos con los veteranos de Azov. Este evento contó con una bandera de batalla del Regimiento Azov que aparentemente fue subastada con la promesa de que todos los miembros sobrevivientes la firmarán después de que se gane la guerra. Los Cónsules Generales de Alemania y Polonia también hablaron en el evento.
El sábado 1 de octubre, tras regresar a Washington, la delegación al completo, excepto Kateryna Prokopenko, que partió para reencontrarse con su marido en Turquía, hizo acto de presencia en la Universidad de Stanford. Yulia Fedosyuk concluyó sus comentarios, «Gloria al Regimiento Azov«. En un momento dado, el profesor de Stanford Michael McFaul, el exembajador de EE. UU. en Rusia (2012-2014) famosamente tonto y orgulloso propietario de una «casa gigante», se detuvo para ofrecer palabras de apoyo a Ucrania, si no al mismo Regimiento Azov.
A principios de este año, el Centro para la Seguridad y la Cooperación Internacionales (CISAC) de Stanford publicó un informe detallado sobre el “Movimiento Azov… una red nacionalista de extrema derecha”. Michael McFaul dirige el Instituto Freeman Spogli de Estudios Internacionales, del que forma parte la CISAC. Aparentemente, no tuvo ningún problema con el símbolo neonazi proyectado detrás de él.
Esta podría no haber sido la última parada de la delegación de Azov en los Estados Unidos, pero sería bastante apropiado. La Universidad de Stanford se encuentra en el distrito del Congreso adyacente a Ro Khanna, cuyas restricciones al apoyo estadounidense al Regimiento Azov deberían levantarse este año, según uno de los oradores del evento. Pero en estos días, incluso Khanna podría no objetar.
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Este artículo fue publicado originalmente por el blog Ukes , Kooks and Spooks de Moss Robeson y ligeramente editado por The Grayzone.
Lea la primera parte de la serie de Robeson sobre la gira estadounidense de Azov aquí .
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SON NAZIS
ZELENSKY BORRA SILENCIOSAMENTE LA FOTO DEL PARCHE PRO-HITLER DE SU GUARDAESPALDAS
El presidente ucraniano publicó una fotografía en sus canales de redes sociales que muestra a uno de sus escoltas de seguridad con un parche que hace referencia a la unidad de guardaespaldas personal de Adolf Hitler.
Como antes, la imagen del parche nazi era real. Además, el parche “Operator Skull” de la compañía R3ICH parece bastante popular en Ucrania. De las tres tiendas en línea con sede en Ucrania que este reportero descubrió que vendían el emblema nazi, no quedaba ninguna en stock.
El 13 de septiembre, el presidente ucraniano, Vlodymyr Zelensky, realizó un viaje sorpresa a la ciudad de Izyum en la región de Kharkov para una sesión de fotos luego de que sus militares recuperaran la ciudad de manos de las fuerzas
rusas. Durante la visita, un soldado que parecía estar custodiando a Zelensky fue fotografiado con un parche de inspiración nazi en su uniforme.
Cuando la imagen generó críticas en las redes sociales, las cuentas oficiales de Telegram y Facebook del presidente ucraniano la eliminaron silenciosamente.
En Izyum el 14 de septiembre, Zelensky participó en una ceremonia de izada de bandera con la melodía del Himno Nacional de Ucrania y se tomó selfies con civiles y soldados locales. Si bien la mayoría de los hombres en la escena vestían uniformes militares oficiales, no fue difícil ver cuáles estaban trabajando, a falta de un mejor término, y cuáles simplemente estaban presentes para participar en el evento.
Una fotografía publicada en las cuentas de Telegram y Facebook de Zelensky (archivada aquí y aquí ) capturó al presidente mientras posaba para selfies con las tropas ucranianas. Mientras Zelensky mostraba una sonrisa para la cámara de un alegre miembro del servicio, estaba flanqueado por un soldado fuertemente equipado que montaba guardia y miraba en dirección opuesta. Justo sobre el hombro derecho de Zelensky, se podía ver un parche pequeño pero significativo en la parte posterior del chaleco antibalas del soldado.
Los usuarios de las redes sociales identificaron rápidamente el símbolo. Se derivó de «Totenkopf» (en alemán, «Cabeza de la Muerte»), una insignia muy utilizada en la Alemania nazi. Las insignias que incorporan el motivo de la calavera y los huesos fueron popularizadas por las Unidades de la Calavera de Alemania, cuya tarea original era servir como guardias en los campos de concentración. En octubre de 1939, unos 6.500 miembros se desplegaron como combatientes de primera línea en el intento de conquista de Europa y la Unión Soviética, llevando a cabo crímenes de guerra y limpieza étnica en su camino.
El guardaespaldas de Zelensky parecía lucir una versión ligeramente alterada del parche de SS-Totenkopf; le faltaban las tibias cruzadas y la calavera llevaba casco.
Sin embargo, este reportero pudo encontrar tres proveedores en línea con sede en Ucrania que venden el parche, que tiene la marca «Operator Skull» y está fabricado por una empresa llamada R3ICH, una referencia explícita a la Alemania nazi.
Si bien aún no ha aparecido una toma clara y de tamaño considerable de la insignia que decora al aparente guardaespaldas de Zelensky, las representaciones mejoradas de la imagen demuestran claramente que lucía el mismo diseño fabricado por R3ICH. Ambas insignias presentan una calavera con un casco, el casco es prácticamente idéntico, la
nariz y los orificios para los ojos comparten la misma cantidad de espacio entre ellos, las siluetas son indistinguibles y las marcas de conteo dibujadas en el casco aparecen en el mismo lugar.
Una mirada más cercana al parche «Operator Skull» del R3ICH revela un detalle aún más inquietante: una llave maestra que se muestra en la parte superior derecha del casco es una clara referencia a la División SS Leibstandarte, o Leibstandarte SS Adolf Hitler, la unidad de guardaespaldas personal de Hitler. La unidad más tarde se convirtió en un Panzer, o división de tanques blindados y, al igual que el Totenkopf, participó en varias invasiones en toda Europa y la Unión Soviética.
Mientras la División Leibstandarte de las SS se abría paso por Járkov —donde esta semana se fotografió al guardaespaldas de Zelensky con el parche “Operator Skull”— durante la Segunda Guerra Mundial, una de sus unidades se ganó el apodo de “Blowtorch Battalion” por su costumbre de incendiar vehículos rusos. -Pueblos de habla.
Después de que este reportero acudiera a las redes sociales para informar que el guardaespaldas de Zelensky parecía estar usando el parche “Operator Skull”, no menos de ocho usuarios de Twitter afirmaron que la imagen estaba retocada. Sorprendentemente, Twitter incluso consideró que el tuit de MintPress News sobre la fotografía era «contenido sensible», un aparente intento de control de daños en nombre de Zelensky que redujo la visibilidad de la imagen en la plataforma.
El avistamiento del parche nazi recordó un incidente de 2018 en el que el entonces presidente de Ucrania, Petro Poroshenko, posó con soldados que portaban carteles con el símbolo nazi Totenkopf. Newsweek afirmó falsamente : “La imagen incluía un cráneo y huesos que parecen haber sido retocados con Photoshop en la fotografía de las tropas ucranianas”. Sin embargo, como informó The Grayzone , el soldado parado directamente al lado de Poroshenko llevaba el parche de inspiración nazi en el pecho. Los paracaidistas luego se disculparon por mostrar el símbolo nazi, desacreditando aún más el giro de Newsweek.
Como antes, la imagen del parche nazi era real. Además, el parche “Operator Skull” de la compañía R3ICH parece bastante popular en Ucrania. De las tres tiendas en línea con sede en Ucrania que este reportero descubrió que vendían el emblema nazi, no quedaba ninguna en stock.
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DESPIADADOS PSICÓPATAS
“ESTOS SON ANIMALES, NO PERSONAS”: Zelensky libera a violadores de niños condenados, torturadores para reforzar militares agotados
Una vez condenados por funcionarios ucranianos y encarcelados por tortura sádica y violación de menores, los líderes del notorio Batallón Tornado están en libertad bajo las órdenes de Volodymyr Zelensky.
Después de prohibir prácticamente a toda su oposición política, publicar una lista negra de periodistas y académicos extranjeros acusados de promover la «propaganda rusa» y aprobar una ley que exime al 70% de los ucranianos de las protecciones laborales, el presidente ucraniano Volodymyr Zelenksy liberó de prisión a militantes fascistas condenados por algunos de los crímenes más atroces que el país ha visto desde la Segunda Guerra Mundial.
Según un informe del 11 de julio en los medios ucranianos, Ruslan Onishenko, comandante del ahora disuelto Batallón Tornado, fue liberado como parte del plan del presidente Zelensky para liberar a prisioneros con experiencia en combate. Junto con un compromiso inquebrantable con el fascismo, Onishenko es conocido como un sádico psicópata que estuvo involucrado en agredir sexualmente a niños, torturar brutalmente a los prisioneros y asesinar.
La liberación de Onishenko sigue a una orden del 27 de febrero de Zelensky para liberar a otros ex miembros del Tornado condenados como Danil «Mujahed» Lyashuk , un fanático de Bielorrusia que ha emulado abiertamente a ISIS y se jactaba de torturar a los cautivos por puro placer. Según el decreto de Zelensky, a los prisioneros con experiencia en combate se les permitiría “compensar su culpa” peleando en los “puntos más calientes”.
En 2015, cuando el estado ucraniano brindó apoyo oficial a su Batallón Tornado, Onishenko envió un mensaje de texto a dos compañeros «patriotas«, Voldomor y Svetlana Savichuk, proponiéndole a Svetlana Savichuk que «chupara mi polla frente a los niños [pequeños]«. (Ver capturas de pantalla de la conversación aquí). También le pidió a Savichuk que realizara actos lascivos con sus hijos para su placer visual. A pesar de la magnitud de sus crímenes, que incluyeron tortura, asesinato, violación, incluida la de niños, secuestro, amputación y más, Onishenko fue sentenciado a solo 11 años de prisión el 11 de abril de 2017.
Ahora, después de cumplir solo cinco años de su sentencia, el depredador convicto ha sido liberado por un presidente aclamado por los patrocinadores occidentales como un defensor de la democracia.
El movimiento de Zelensky no es solo una señal de desesperación, ya que sus fuerzas armadas son aplastadas por las fuerzas rusas en el este. Extiende la impunidad virtual de la que los batallones ucranianos infestados de criminales empedernidos y neonazis han disfrutado durante más de ocho años como ejecutores oficiales del régimen posterior a Maidan.
A medida que las unidades regulares desertan después de Maidan, los batallones llenan el vacío.
En febrero de 2014, cuando el golpe de Euromaidán respaldado por Estados Unidos expulsó al presidente elegido democráticamente de Ucrania, el nuevo régimen de Kiev se enfrentó a una crisis. En todo el país, las unidades militares y los gobiernos locales todavía estaban llenos de rusos étnicos y otros elementos supuestamente «antipatrióticos«. Los políticos de etnia rusa, en su mayoría del este, fueron tildados de «diputados radicales» y secuestrados, perseguidos u obligados a huir de alguna otra manera.
El 23 de febrero de 2014, Oleksandr Valentynovych Turchynov se convirtió en presidente interino de Ucrania y promulgó una legislación radical sin mandato electoral o constitucional. En toda Ucrania, la mayoría de los ciudadanos se negaron a reconocer la legitimidad del nuevo régimen golpista. Las áreas al este del río Dnieper habitadas por un gran número de hablantes de ruso, judíos, musulmanes y otras minorías nacionales pronto se convertirían en objetivos de paramilitares de derecha como el batallón Tornado de Onishenko.
En las ciudades orientales de Lugansk, Donetsk, Mariupol, Odessa y Kharkiv, los residentes asediaron los edificios del gobierno local y los edificios de los servicios de seguridad ucranianos para presionar por un referéndum sobre la independencia. Ni el ejército local ni la policía intentaron detener a estos manifestantes.
Según un informe militar estadounidense de 2016 :
Ciertamente, las fuerzas prorrusas no encontraron resistencia armada al principio. De hecho, la verdadera situación sobre el terreno era aún peor. Según el ministro del Interior de Ucrania, hasta el 70 por ciento de la policía de la región había permitido o ayudado activamente en las tomas de edificios.
Cuando el gobierno posterior a Maidan se negó a otorgar a estos ciudadanos un referéndum o una representación significativa en el gobierno, dos de los óblast regionales del este, Donetsk y Lugansk, declararon su independencia.
La crisis de legitimidad del gobierno posterior a Maidan creció cuando las unidades militares ucranianas enviadas a Donetsk para sofocar la rebelión terminaron desertando al lado de los residentes antigolpistas de Maidan. Desesperado por salvar a su nuevo régimen, el presidente interino no electo Oleksandr Turchynov anunció operaciones antiterroristas a gran escala para “sofocar a los terroristas” en el este. Sin embargo, el ejército ucraniano se mantuvo obstinado y se negó en gran medida a seguir las órdenes de Kiev.
En abril de 2014, la brigada aerotransportada número 25 de las Fuerzas de Asalto de Alta Movilidad de las Fuerzas Armadas de Ucrania fue enviada a Donetsk para librar la guerra a sus residentes. Sin embargo, en palabras del amargado presidente interino Turchynov el 17 de abril de 2014 en la Verjovna Rada, “la 25ª Brigada Aerotransportada separada, cuyo ejército mostró cobardía y entregó las armas, será desmantelada… El Ministerio de Defensa ha recibido esta instrucción”.
Turchynov envió una orden correspondiente a la oficina del Fiscal General exigiendo el castigo penal de los militares desobedientes. Si bien el Ministerio de Defensa de Ucrania negó que la brigada desertara al lado de los separatistas, los tanques de la unidad comenzaron a enarbolar la bandera de la DNR, como informaron incluso los principales medios occidentales.
Días después de que el presidente interino «disuelva» la 25.ª Brigada, el «vicegobernador» recién instalado de Dnipropetrovsk anunció la formación de «fuerzas especiales» para «proteger el oblast» de caer en «manos de Rusia«. Mientras que el salario medio de Ucrania para 2014 fue de 3480₴ ($117 USD), los «voluntarios» de estos batallones, según el vicegobernador del Óblast de Dnipropetrovsk, Hennadiy Korban, recibieron 29528₴ ($1000) por mes. Eso es casi diez veces el salario promedio en Ucrania.
Después de la pérdida de partes de los óblasts de Lugansk y Donetsk y toda la península de Crimea, Kiev creía que el Óblast de Dnipropetrovsk, con su gran población de habla rusa, sería el próximo Óblast en declarar la independencia. Incapaz de confiar en el ejército ucraniano, ni en la fuerza policial actual, que consideraban “infiltrada por separatistas prorrusos”, Kiev delegó oficialmente a las fuerzas paramilitares fascistas que funcionaron como fuerza callejera durante el golpe de Maidan.
En marzo de 2014, Kiev aprobó una ley que establecía una “guardia nacional” que sería supervisada por el Ministerio del Interior. Con el consentimiento del entonces ministro del Interior Arsen Avakov, el multimillonario ucraniano Igor Kholmoisky financió la creación de algunas de las fuerzas de defensa territorial más notorias del país. El primero de estos “batallones especiales de policía”, Dnipro-1, nació de la fortuna del oligarca. Uno de los diputados de Kholmoisky, Boris Filatov, declaró que el objetivo de estos batallones especiales era “volver a unir al país”.
En cambio, los batallones especiales (Dobrobats) reclutaron del núcleo de activistas de Maidan que lucharon contra la policía antidisturbios del presidente depuesto. Oleg Lyashko, un autodenominado “diputado del pueblo” que fundó el Partido Radical y apareció en el escenario principal durante las manifestaciones golpistas de Euromaidán, intentó establecer su propio Dobrobat llamado “Ucrania«. Debido a que Lyaschko no tenía el dinero para financiar un batallón formal, su grupo tendría que hacer una audición para obtener el apoyo de los oligarcas ofreciéndose como voluntario para luchar en la ciudad de Torez en el óblast de Donetsk.
En ese momento, Ruslan Onishenko era conocido como un criminal de carrera con tres condenas por robo, vandalismo y encarcelamiento ilegal (secuestro) en su haber. Nacido Ruslan Abalmaz, adoptó el apellido de su esposa, «Onishenko«, después de Euromaidan. Como nativo de Torez, se convirtió en una figura central en la “formación de prueba” del nuevo batallón de Lyashko.
Sin embargo, el plan para recuperar Torez de manos de los separatistas fracasó, lo que llevó a Onishenko y su equipo a huir a la ciudad vecina de Dnepropetrovsk, el hogar del multimillonario Igor Kholmoisky. Eventualmente, con el apoyo del Ministro del Interior Arsen Avakov y su adjunto, el mediador político de derecha Anton Gerashenko, Onishenko pudo convencer a Kholmoisky de financiar un nuevo batallón llamado “Shaktorysk”.
En junio de 2014, comenzó una campaña de relaciones públicas para el Batallón Shaktyorsk en EspressoTv, el medio no oficial de los «batallones especiales«, así como en UkroTV, elogiando a Onishenko como «el único hombre que lucha por el alma del país«.
Ese mismo mes, los combatientes de Shaktorysk recibieron entrenamiento bajo los auspicios del cuartel general de la policía regional. El 8 de julio de 2014, la nueva unidad de policía se «graduó» oficialmente y prestó juramento antes de ser enviada a Mariupol.
Según el exagente de la SBU convertido en denunciante Vassily Prozorov, “Desde la decisión del Ministro del Interior Arsen Avakov de establecer unidades especiales de ‘patrulla’ de la policía dentro de la estructura del Ministerio del Interior (MVD), estas divisiones comenzaron a aparecer como hongos después de un día de lluvia«. Los batallones especiales crecieron de solo dos en los días posteriores a Euromaidán a cincuenta y nueve en varios meses.
Siete días antes de graduarse de su campo de entrenamiento, los miembros del batallón Shaktoyrsk hicieron alarde de sus tendencias sádicas. El 1 de julio, apenas una semana antes de que terminara el entrenamiento de la unidad, un civil local llamado Ruslan Kyrenkov estaba visitando la casa de un amigo cuando fue abordado por “una banda de hombres armados”. Lo sacaron a rastras de la casa, alegando que era un separatista, y lo llevaron a una de sus prisiones subterráneas secretas. Si bien su terrible experiencia solo duró dos días, le dijo a este reportero, «se sintió como quince días«.
Kyrenkov estaba atado a una silla, mientras un miembro enmascarado del batallón sacaba un soplete y quemaba la carne del pecho y los brazos. Fue torturado durante tres días seguidos. Incluso hoy, lleva las cicatrices de su tortura. “Solían ser mucho más oscuras”, dijo sobre sus heridas de tercer grado, “pero ahora se han aclarado”.
El Batallón Shaktoyrsk no fue el único en su barbarie. Muchos de los batallones especiales operaron con total impunidad mientras sus comandantes ganaban dinero participando en el contrabando de prácticamente cualquier bien, sabiendo que siempre podrían establecer un monopolio a través de la violencia bruta.
Por ejemplo, en julio de 2015, Right Sektor operó un cártel de contrabando de tabaco en la ciudad de Mukachevo. Cuando estalló un conflicto entre dos facciones de la unidad de extrema derecha, se produjo un tiroteo y la policía intentó intervenir.
Según la oficina del fiscal local:
El 11 de julio en Mukachevo alrededor de las 14:00 horas, 20 personas armadas y camufladas con las etiquetas “Sector derecho” y pegatinas similares en sus automóviles llegaron a una cita con los residentes locales en un café con el fin de repartirse las esferas de influencia. Se desató un conflicto y los hombres armados comenzaron a disparar con armas de fuego contra el mencionado establecimiento. Según información preliminar, 6 policías y 3 civiles sufrieron heridas de bala de diversa gravedad. Cinco de los hombres armados con etiquetas de ‘Sector Derecho’ también resultaron heridos”.
Sin embargo, los miembros de Right Sektor terminaron escapando de la policía, que no pudo desarmarlos. Después de que la policía persiguiera a la banda armada, Right Sektor tomó represalias tomando como rehén a un niño de 6 años. El 25 de julio de 2015, después de no poder desarmar al Sector Derecho, el Ministro del Interior Arseniy Avakov suspendió al jefe de policía en Mukachevo. Ahora la pandilla derechista no solo podía continuar con sus actividades de contrabando de tabaco sin el acoso oficial, sino que podía decidir quién sería el siguiente en dirigir la policía local.
Junto con la impunidad total, Estados Unidos proporcionó a los paramilitares de derecha un almacén de armas aparentemente interminable. El entonces comediante Zelensky se burló de la tendencia en una de sus rutinas de comedia televisadas a nivel nacional. En una parte especialmente notable, Zelensky interpretó a un policía en la policía posterior a Maidan cuya única calificación para el trabajo era ser sobrino del jefe de policía.
En la rutina de Zelensky, una desafortunada unidad de policías novatos hace estallar accidentalmente un costoso tanque. “No se preocupe, Estados Unidos lo reemplazará”, declaran con un encogimiento de hombros casual.
Como presidente, Zelensky parece haber olvidado el daño causado a su país por Dobrobats fuera de control y completamente irresponsables , y ha autorizado su alboroto continuo.
Tornado se forma en medio de fracaso militar
En agosto de 2014, el Batallón Shakhtyorsk de Ruslan Onishenko participó en otra operación desafortunada del gobierno ucraniano para recuperar un área controlada por los separatistas, esta vez en la ciudad oriental de Ilovaisk. Al final, los Dobrobats ucranianos fueron rodeados por combatientes de la Milicia Popular de Donetsk y obligados a abortar su misión. La dolorosa derrota fue un factor importante que obligó al gobierno golpista de Ucrania a negociar con las repúblicas separatistas de Donbass bajo las directrices de los Acuerdos de Minsk.
Extrañamente, a pesar de retirarse con la cola colectiva entre las piernas, el batallón Shakhtyorsk de Onishenko recibió un elogio del ministro del Interior, Arseny Avakov, por su supuesta valentía en Ilovaisk. Sin embargo, solo un mes después, en septiembre de 2014, el presidente Poroshenko y otros miembros del gabinete adoptaron repentinamente la decisión de disolver Shakhtyorsk, acusándolo de saqueo.
En una declaración confusa, Avakov declaró: “Mientras luchaba maravillosamente dentro de Ilovasky, el batallón Shakhtyorsk se disolvió bajo mis órdenes debido a muchos casos de saqueo en Volnovakha y otras situaciones en lugares cercanos”.
El batallón Shakhtyorsk se dividió así en dos grupos: uno que se autodenominó “Santa María«, y un segundo dirigido por Onishenko llamado “Tornado”, que estaba formado en gran parte por residentes pro-Maidan de Lugansk y Donetsk, así como algunos extranjeros.
Mientras tanto, bajo cuatro oleadas de movilización en 2015, Ucrania intentó ampliar sus fuerzas armadas regulares de 130.000 al “recuento oficial” de 230.000. Sin embargo, la naturaleza desordenada del reclutamiento solo logró atraer a los soldados que no podían participar de manera efectiva en ninguna operación de combate. En marzo de 2015, Yuri Birukov, uno de los asesores del entonces presidente ucraniano y oligarca multimillonario Petro Poroshenko, declaró en Facebook que Ucrania logró reclutar una gran cantidad de “alcohólicos, tramposos, drogadictos e imbéciles”.
Solo en la región de Donbass en 2015, las fuerzas armadas ucranianas presenciaron más de 16.000 casos de deserción. Algunas de estas deserciones ocurrieron después de que se aprobara una ley ese año que autorizaba a los oficiales al mando a fusilar legalmente a los desertores.
El gobierno ucraniano se vio cada vez más obligado a recurrir a dobrobats extremistas como Tornado y líderes psicóticos como Onishenko en busca de ayuda para luchar contra los separatistas del este.
“Esta unidad está fuera de control”: Funcionarios ucranianos e informes de derechos humanos patrocinados por el Departamento de Estado detallan el increíble sadismo de Tornado
Tornado, como los otros Dobrobats, reclutó una mezcla de fanáticos de extrema derecha y criminales empedernidos. Sus filas incluían al extremista bielorruso Danil Lyashuk, que usaba el distintivo de llamada «Mujahed» y ha hecho afirmaciones sobre convertirse al Islam y apoyar a ISIS. Si bien no está claro si Lyashuk realmente sirvió en ISIS, ha emulado abiertamente el apetito de la milicia islamista por el sadismo desquiciado. En una grabación de audio de 2015, Lyashuk proclamó: “sin tortura, la vida no es vivir”. Esto se convirtió en su lema.
Inmediatamente después de su formación oficial, algunos de los miembros de Tornado comenzaron a vender sus armas en el mercado negro. El 2 de noviembre de 2014, Kiev llamó a seis combatientes de Tornado, los desarmó y los reasignó al Óblast oriental de Zaporizhya. Allí, intentaron extorsionar al alcalde, Alexander Sin. Sin embargo, se mantuvo firme y exigió que el batallón Tornado fuera trasladado fuera de su región. Como era de esperar, Sin se encontró con acusaciones de corrupción, separatismo y traición por parte de elementos nacionalistas radicales , pero al final aseguró la transferencia de los extremistas al óblast de Lugansk, que todavía estaba bajo el control de Kiev en 2015.
El Kharkiv Human Rights Group redactó un informe en nombre del Departamento de Estado de EE. UU. que detalla el terror impuesto a los lugareños por las “patrullas diarias” de Tornado en Lugansk:
Personas camufladas, portando ametralladoras, tumbaron puertas, allanaron casas particulares, allanaron (sin permiso de los jueces), “requisaron” objetos de valor, humillaron y golpearon a los propietarios y amenazaron con dispararles. Agarraron a la gente de las calles y retenes, y con bolsas en la cabeza, los llevaron a los sótanos, donde “realizaron un trabajo de identificación del separatismo” entre los vecinos de la aldea.
El comisionado del Departamento de Estado informó acerca de la continuación:
Muchos hombres fueron sacados a la fuerza de sus hogares y llevados escoltados al edificio del hospital ferroviario en Novaya Kondrashovka. La mayoría de los detenidos fueron puestos en libertad, pero ha habido casos de personas desaparecidas tras ser detenidas ilegalmente por combatientes del batallón. Entre el verano de 2014 y finales de 2016, hubo 11 casos conocidos de residentes desaparecidos de Stanytsia Luhanska.
El 3 de enero de 2015, dos lugareños de Lugansk, Sergey Valuveskii y su amigo Kosta, fueron víctimas del batallón Tornado durante una visita de rutina a una tienda en el pueblo de Mareko. Para asombro de los lugareños, la tienda se llenó con una columna de hombres vestidos con ropa militar, con el rostro cubierto y portando rifles automáticos completamente cargados. Valuveskii le dijo a uno de los hombres enmascarados en la tienda: “Estás parado allí con una ametralladora y presumiendo frente a una chica”.
Este comentario aparentemente inocuo fue suficiente para que los milicianos enmascarados arrastraran a Valuveskii y Kosta fuera de la tienda y los golpearan hasta dejarlos sin sentido con las culatas de sus ametralladoras. Finalmente, los arrojaron dentro de una camioneta y los llevaron a un sótano del hospital en Novaya Kondrashova. Después de dos semanas de tortura, regresó a casa tan desfigurado que su esposa no pudo reconocerlo.
Mientras que Onishenko ahora deambula libremente gracias a la orden oficial de Zelensky, varios lugareños de Lugansk que provocaron la ira de su unidad permanecen en prisión por los motivos más engañosos. Un ejemplo particularmente inquietante de la crueldad de Tornado ocurrió luego de una explosión en un puesto de control en la ciudad de Stanitsa Luganskaya que mató a un soldado de 36 años en enero de 2015. Un mes después de la explosión mortal, el Batallón Tornado detuvo a un soldado de 65 años, un pensionista llamado Nikolay Ruban. Según las afirmaciones de Markiyan Lubkivsky, asesor del presidente de la agencia de inteligencia SBU de Ucrania, el jubilado fue sorprendido “in fraganti” portando una “TNT” y una mecha oculta en un tarro de miel.
Nikolay Ruban fue posteriormente torturado en una prisión improvisada subterránea mantenida por el batallón Tornado, según el relato de un compañero de prisión.
“Lo vi, este abuelo, que luego fue condenado por sostener un tarro de miel en una barricada”, dijo el excompañero de celda al Kharkiv Human Rights Group . “Él también estaba en el sótano de Motobond al mismo tiempo que nos detuvieron. En primer lugar, el abuelo fue golpeado brutalmente. Estaba casi desnudo y completamente descalzo. Su ropa estaba rota. Estaba llorando todo el tiempo y me pidió que le explicara por qué estaba detenido. Venían a golpearlo cada dos horas. Cada vez entraba gente diferente. Cuando [un compañero de celda] y yo fuimos liberados, él todavía estaba allí. También lo estaban los otros prisioneros. Lo que les pasó después, no lo sé. Cuando se supo que fue sentenciado a 15 años, me sorprendió”.
Ruban pronto fue transferido a la custodia de SBU, donde después de un año, durante un juicio altamente sospechoso en el que la única prueba fue su posesión de un tarro de miel, fue sentenciado a 15 años de prisión por cometer actos de terrorismo. Al parecer, también confesó ser un espía ruso que tenía contactos con el GRU.
Otro lugareño llamado Sergey Petrinko afirmó que el Batallón Tornado “se los llevó a él y a un amigo a plena luz del día, a media tarde”. En la mazmorra del batallón, perdió la noción del tiempo y cayó en un estupor aterrorizado. “Algunos siempre estuvieron ahí”, recordó Petrinko. “Algunos fueron traídos, algunos fueron llevados, algunos fueron rescatados”. También testificó que los zorros en el bosque habían desenterrado los huesos de otro conocido cuyo cadáver fue arrojado después de morir en la cámara de tortura de Tornado.
Además de estos actos de crueldad, los miembros del batallón Tornado se han jactado de violencia sexual extrema, incluida la violación de niños pequeños. Fue la inclinación de la unidad por la perversión lo que probablemente provocó la orden del Ministerio del Interior de junio de 2015 para disolverlos.
Sin embargo, el gobierno ucraniano se llevó una sorpresa cuando se dio cuenta de que, después de todo, no tenía la autoridad para controlar estos batallones. Tras la orden de disolver y registrar las bases de Tornado, el viceministro del Interior, Anton Gerashenko, apareció en el Canal 112, a favor de la oposición, para quejarse de los paramilitares extremistas a los que había delegado personalmente. «Hay una orden judicial para registrar la base donde se encuentra el batallón Tornado«, afirmó Gerashenko. “Si alguien se permite no cumplir con la orden judicial, en este caso, esta unidad está fuera de control”.
Posteriormente, el 18 de junio de 2015, el fiscal militar jefe Anatoliy Matios informó que los combatientes Tornado se negaron a desarmarse y se atrincheraron dentro de su base en una escuela en Severodonetsk.
Las autoridades ucranianas finalmente pudieron arrestar a Onishenko en el aeropuerto de Donetsk. Sus compañeros de armas respondieron negándose durante varios días a obedecer las órdenes de Kiev, impidiendo que los investigadores entraran en su base para realizar registros y amenazando con resistencia armada si las fuerzas del orden intentaban hacerlo con el uso de la fuerza.
En medio de la crisis, Gennadiy Moskal, entonces presidente de la Administración Civil-Militar de Lugansk, informó que los combatientes del batallón Tornado habían tomado posiciones defensivas y desplegado equipo militar en preparación para una batalla con Kiev. Finalmente, después de enviar otras unidades militares ucranianas, el batallón rebelde finalmente fue sofocado y sus miembros arrestados.
Una película de terror de la vida real se desarrolla en el juicio del batallón Tornado
Tras las detenciones, el fiscal general ucraniano encontró pruebas de crímenes espantosos cometidos por varios miembros del batallón. En el teléfono de Daniel “Mujahed” Lyshook, el fiscal encontró un video (a las 2:23 ) de otros dos miembros del batallón Tornado violando a un tercer hombre en dos orificios separados. Lyshook afirmó durante su juicio que ordenó la horrible violación porque la encontró divertida.
Durante los juicios de 2016, otra víctima secuestrada testificó que estuvo encadenado a una bola amarilla gigante durante semanas (ver después de la marca de 10 minutos). Los procedimientos judiciales también arrojaron imágenes repugnantes de los teléfonos de los combatientes del Tornado que mostraban mujeres desfiguradas y cadáveres en descomposición ensuciando bases militares.
El juicio del batallón Tornado vio el testimonio de 111 testigos junto con evidencia esparcida dentro de las áreas de Lugansk, al menos 80 cuerpos, atribuibles a la violencia de Tornado. Los jueces se vieron abrumados con imágenes de genitales mutilados, castraciones y otras formas de tortura sexual.
Un testigo exhibió una cicatriz en su brazo: un pene y dos testículos grabados sádicamente en su brazo izquierdo por un miembro de Tornado con un cuchillo de trinchar (ver foto arriba). En la galería, una madre se vio obligada a escuchar el testimonio de cómo el batallón violó brutalmente a su hijo antes de matarlo. Los testigos describieron cómo una niña de diez años fue secuestrada para pedir un rescate y violada repetidamente en una película hasta que murió poco más de una semana después de ser secuestrada.
El gobierno de Kiev reaccionó condenando obligatoriamente a los matones de Tornado, pintándolos como una colección de manzanas podridas que no reflejaban el carácter general del ejército ucraniano.
Tatyana Chornovil, activista de Euromaidan y ex miembro del ultranacionalista Batallón Aidar, acudió al canal 112 poco antes del juicio para emitir una declaración dramática:
“Los comandantes de Tornado fueron arrestados y sus teléfonos celulares confiscados. Este es un video de varias orgías sexuales, violaciones. E incluso diría que había bebés recién nacidos. Entiendo que la madre con este recién nacido se vio obligada a hacer esto bajo la amenaza de muerte de su hijo. Hubo violaciones de niñas menores de edad. Estos son animales, no personas”.
Ahora, Zelensky está dejando que los «animales» salgan de sus jaulas bajo el pretexto de la guerra.
Aunque los miembros de Tornado representan algunas de las bestias más salvajes que han acechado al público, otros 58 batallones como este siguen operativos en toda Ucrania.
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TWITTER PERMITE EL ACOSO NAZI DESDE ALEMANIA
El 24 de abril pasado, el blog Berlinconfidencial.com denunciaba la persecución desatada por unas cuentas de Twitter radicadas en Alemania a usuarios de esta red que ofrecen información sobre la guerra de Ucrania silenciada en los grandes medios. El resultado es cuentas suspendidas temporal o definitivamente. A día de hoy, esta actividad persecutoria continúa y son ya numerosas las amonestaciones y cancelaciones debidas a los informes que este escuadrón alemán envía a la empresa de Silicon Valley, que, como sabemos, tiene estrechos lazos con los servicios de inteligencia estadounidenses.
La censura ya es una realidad en todas las redes sociales
Por Berlin Confidencial, 24 ABRIL 2022
En los últimos días o semanas se ha incrementado la actividad inquisitorial de las cuentas fascistas alemanas (muy probablemente con el respaldo de la Gestapo de ese país, BND y la neohitleriana BfV, la infame Oficina federal de protección de la Constitución) a raíz del comienzo de la operación especial de Rusia en Ucrania.
No es de extrañar que, ante la política de cerrojazo mediático y dictadura totalitaria implantada por Bruselas (y la mordaza fascista que se avecina del IV Reich europeo), censurando medios rusos como RT o Sputnik, esta gentuza se haya venido arriba y, en particular, contra mí, hayan montado una campaña terrorista persecutoria de denuncias masivas sobre todo lo que he venido escribiendo en Twitter contra el régimen de Kiev, aunque han reportado todo tipo de contenido. Rara es la vez que no aparecían (y lo siguen haciendo) en mi correo, a diario, decenas de denuncias sobre mis tuits, exigiéndome Twitter, incluso, la «veracidad» del tuit. Esperpéntico.
Usuarios alemanes como @cLyppersen (una de las principales hienas instigadoras), @EickeTarkus, @PAugenkiste, @EC78452515, @Fischer_Beppe y sus incontables esbirros o multicuentas han sido especialmente activos en España, dedicando su inútil vida a estar las 24 horas monitoreando cuentas anti-ucronazis (o críticas contra las fraudulentas «vacunas» covidianas) para reportarlas, jactándose de las que han logrado suspender definitivamente, que han sido, por cierto, bastantes (en mi caso, 7 días de suspensión injustificada; cuenta @DenazificationP con 11 mil seguidores).
Estas cuentas nazi-alemanas, que tienen la particularidad de autonombrarse falsamente «antifascistas», anti-AfD (la extrema derecha alemana), «Nazis Raus» (Fuera nazis) y mostrar un odio enfermizo hacia Rusia, han sido reiteradamente denunciadas por acoso selectivo, sin que Twitter haya adoptado ninguna medida «sancionadora» contra ellas.
La cadena interminable de cuentas suspendidas, todas ellas denunciando los crímenes contra la Humanidad de las marionetas nazis de la UE y su propaganda mentirosa (difundida incansablemente por el regimiento Azov mediático de Occidente), ha sido una constante en la plataforma estadounidense, plegada a las órdenes belicistas de EEUU y la OTAN.
El periodista independiente Pepe Escobar, Scott Ritter (experto en armas químicas de la ONU), ASB Military News, MapsUkraine y un largo etc, son algunas de las cuentas que, injustificadamente, ha cercenado Twitter para evitar que se conozca la realidad de las atrocidades del criminal Zelensky y su régimen homicida.
Occidente ha decidido apostar con furia por sus nazis de Ucrania ante el contragolpe de Rusia de no permitir que la organización criminal OTAN se acercase a sus fronteras, utilizando a su payaso de Kiev. Y lo ha hecho desatando una campaña criminal global de rusofobia nunca antes vista con ningún otro país (olvidándose de sus genocidas favoritos: Israel -que masacra palestinos cada día-, y EEUU -que actualmente ocupa ilegalmente Siria-; ellos mismos no se pueden autocondenar, suena ocioso decirlo).
Todo esa ingente propaganda no sería posible sin la ayuda de sus mamporreros mediáticos, agentes desinformadores y sus miles de trolls nazis, muchos de ellos pagados por los servicios de inteligencia, para difundir bulos contra Rusia y también atacar y silenciar a sus oponentes críticos.
Políticos europeos (con mención especial para el régimen «socialcomunista» español), redes sociales como Facebook o Twitter y medios hegemónicos (con sus «verificadores»-fake), son instigadores de esta desatada rusofobia que asola el mundo, e impagables cooperadores en las atrocidades del régimen zelenkista, alentando sus crímenes, enviando a los ucronazis de Azov armas pesadas para matar civiles, ocultando el asesinato de periodistas, opositores y blogueros por la Gestapo SBU ucronazi (con el seguro asesoriamiento de la CIA y el FBI), así como borrar de sus noticias los pogromos callejeros.
En definitiva, ese contubernio político-mediático está secuestrando la verdad, distorsionando los hechos y falsificando el relato de lo que está aconteciendo en Ucrania, como se ha podido comprobar en Mariúpol (ciudad donde los terroristas del batallón nazi Azov han utilizado escudos humanos, disparando a civiles con armas pesadas), en las calles ucranianas donde las tropas de asalto de Zelensky capturan civiles para atarlos a postes o farolas con cinta adhesiva, o en el crimen masivo de Bucha, perpetrado por fuerzas ucronazis.
ADDENDA:
He entrado, por casualidad en Twitter sin registro, y veo que la cuenta de @IrinaMar10, la más activa en España informando sobre el nazismo ucraniano, y con más de 70 mil seguidores, ha sido suspendida por Twitter-nazi. Adivinen quiénes fueron los que sincronizadamente reportaron su cuenta y desde dónde. La misma que figura arriba citándome.
(Gemeldet, es reportado)
Y ella y sus amigas se enorgullecen de ello:
También la psicópata alemana @cLyppersen tiene su objetivo puesto en David, otro gran informante de la guerra de mentiras del ucronazismo.
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En 2019, un supremacista blanco australiano asesinó a 49 personas en Nueva Zelanda. Como discutió esta semana Fairness And Accuracy in Reporting , en ese momento, el New York Times informó correctamente que “En su chaleco antibalas había un símbolo comúnmente utilizado por el Batallón Azov, una organización paramilitar neonazi ucraniana…”. Entonces, al menos en 2019, el New York Times se opuso a los neonazis. ¡Qué bien de ellos! Sin embargo, eso ha cambiado mucho este año. Apenas la semana pasada, el New York Times escribió sobre esa misma organización neonazi: “Los comandantes del célebre Batallón Azov de Ucrania celebraron una emotiva reunión con sus familias en Turquía, dijeron funcionarios ucranianos, en honor a los combatientes liberados del confinamiento ruso el mes pasado… ” Qué conmovedora reunión está anunciando el Times para sus queridos nazis. El pastel de bienvenida a casa probablemente tenía una esvástica hecha de mazapán. Tal vez tenían una piñata con forma de Martin Luther King jr. o algo.
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